jueves, 26 de noviembre de 2015

Siempre transparente como la lluvia en la ventana

...como la gota de rocío que se escurre entre los pétalos de los pensamientos.

No puedo pensar en otra cosa que no sea mi absorbente máster y mi precioso novio. Excepto por las noches, cuando el ruido no me deja dormir.

Estos estudios me están volviendo loca, no tengo tiempo ni para abrir el ordenador, es como si viviera en una etapa de exámenes continua, solo hago que estudiar y estudiar. Es lo que me gusta sí, pero aún y así se hace difícil aceptar que tengo que estar los próximos dos años en este estado, y además sin poder trabajar ni, por lo tanto, independizarme. Es deprimente porque mi corazón me dice que es tiempo de moverse, pero el sueño por el que he estado esperando tanto tiempo está aquí ya, y yo no puedo disfrutarlo.

Estoy frustrada... aunque me siento segura, confiada en mis capacidades que, una vez más, y otra, me demuestran lo equivocada que estoy cuando me machaco.
Hay que aguantar, aguantar los truenos, y luego la tormenta y el viento que se llevará las nubes y entonces...entonces solo quedarán las estrellas imperecederas.